DÍA EUROPEO DE LA DEPRESIÓN


Cada primer jueves de octubre, se celebra el Día Europeo de la Depresión.

Jueves 3 de octubre 2013 “Día Europeo de la Depresión”

Cada primer jueves de octubre, se celebra el Día Europeo de la Depresión, es una iniciativa internacional de la Asociación Europea para la Depresión -European Depression Association (EDA)-, que se celebra simultáneamente en varios países europeos desde el año 2004.

El objetivo de este día es promover dentro de todos los países europeos una jornada para concienciar de la importancia de la depresión así como un día para exigir soluciones mejores y más adaptadas.

La depresión es un trastorno del estado de ánimo y su síntoma habitual es un estado de abatimiento e infelicidad que puede ser transitorio o permanente.
El aumento de los trastornos anímicos en nuestro entorno es ya una realidad más que constatada.

Hoy en día, la depresión constituye un problema de salud de elevada trascendencia, con graves repercusiones tanto para el paciente, los familiares y la sociedad en general. Está situada entre los 3 primeros puestos de la lista de causas de discapacidad en el mundo y según datos de la Organización Mundial de la Salud, en el año 2020 la depresión será la primera causa de discapacidad en todo el mundo, sólo superada por las enfermedades cardiovasculares.

La concienciación social sobre el incremento de la carga asociada a la depresión se hace cada vez más patente, por lo que resulta fundamental disponer de una adecuada información sobre esta enfermedad.








DEPRESIÓN:La depresión es un trastorno del estado de ánimo, relacionado con la indefensión, caracterizado por sentimientos de tristeza o pena, sensación de falta de energía y pérdida de interés o motivación, que afecta en distinto grado a la persona que lo sufre.

TIPOS:

Trastorno depresivo grave:caracterizado por síntomas que incapacitan a la persona para realizar actividades diarias tales como trabajar, dormir o incluso comer. Suele tener una duración de meses e incluso llegar a hacerse crónica.

Trastorno distímico: caracterizado por síntomas de larga duración que, aunque menos graves, impiden desarrollar una vida normal.

Depresión postparto: se diagnostica cuando una mujer que ha dado a luz sufre un episodio de depresión dentro del primer mes después del parto.

Trastorno afectivo estacional: caracterizado por la aparición de síntomas depresivos durante los meses de otoño e invierno, en forma de tristeza y aislamiento, y durante primavera y verano, en forma de cansancio y apatía.

Trastorno bipolar: caracterizado por cambios cíclicos del estado de ánimo que van desde estados de ánimo muy elevados, como la euforia, a estados de ánimo muy bajos, como la depresión.

Caracteristicas o signos de la depresión:

Los síntomas o signos de la depresión se focalizan en cuatro áreas básicas: conductual, afectiva, cognitiva y neurovegetativa.


  1. La persona depresiva pierde el interés en casi todas las actividades usuales, y en las que antes le ocasionaban placer.
  2. Prefiere estar triste, desesperanzada, desanimada. A menudo recurre a expresiones como: "me siento dentro de un hoyo", "creo que toqué fondo".
  3. Hay trastornos del apetito, generalmente por disminución del mismo, junto con una pérdida significativa del peso. Otras personas muestran un aumento del apetito o de la ingestión de alimentos -aunque no haya apetito- y también del peso.
  4. En el caso de los niños, tienden a dejar de comer, estancándose en su proceso de crecimiento.
  5. Son comunes los trastornos del sueño: dificultades para quedarse dormido, sueño interrumpido, demasiado sueño (hipersomnia).
  6. El aspecto psicomotor sufre alteraciones: la persona puede sufrir episodios de agitación, incapacidad para permanecer tranquila, estallidos de queja o de gritos.
  7. En el otro extremo, hay lentificación psicomotora, que se traduce en un hablar muy pausado y en movimientos corporales lentos. Y en los niños se observa una importante disminución de la actividad.
  8. Casi invariablemente decae la energía. La persona experimenta una fatiga constante, hasta la tarea más pequeña puede parecer una tarea difícil o imposible de lograr.A esto se agrega un sentimiento de minusvalía. El individuo cree que todo lo ha hecho mal; y recuerda sus errores, magnificándolos. Se reprocha, incluso, detalles mínimos, y busca en el ambiente cualquier signo que refuerce la idea de que él no vale nada.
  9. Hay sentimientos de culpa, igualmente exagerados, sobre situaciones presentes o pasadas.
  10. Es frecuente que la persona tenga dificultades para concentrarse, y que le cueste tomar decisiones o recordar las cosas pasadas.
  11. Se presentan pensamientos constantes acerca de la muerte, que incluso llevan a elaborar ideas suicidas. Aunque puede sentir miedo de morir; no obstante estar convencido de que él y los demás estarían mejor si falleciera.
  12. También se presentan síntomas como: llanto frecuente, sentimientos de angustia, irritabilidad, mal genio, preocupación excesiva por la propia salud física, ataques de pánico y fobias.



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